10/3/10

PANAMA: Vamos a la Escuela!

          8 de Marzo comienzan las clases en Panamá. Después de las vacaciones los niños regresan a la escuela. Los que vivimos en la ciudad vemos un tránsito, ó tranque como se dice en Panamá  abrumador. Las escuelas privadas en la ciudad mandan sus buses escolares a recoger a los niños a sus casas y a sus barrios cerrados. En el interior del país ya cambia la cosa, las paradas de colectivos públicos se llenan de niños uniformados quienes usan ese transporte para llegar a sus escuelas  públicas. Seguro que el lector estará pensando que esto es muy normal de ver en los países latinoamericanos y es verdad, pero hay algo que me llamó la atención y que fue como los niños indígenas se preparan para ir a la escuela.           
          Estos niños caminan descalzo por los senderos (a veces con mucho lodo o con algunas culebras venenosas que se hacen notar en el camino) hasta llegar a un lugar donde cruzan el río para luego caminar hacia su escuela. El niño indígena Emberá (foto) venia caminando hacia mi con sus zapatos brillosos en la mano y su uniforme impecable algo que me llamó muchísimo la atención ya que sus viviendas son muy precarias. Mientras yo caminaba por el sendero hacia la comunidad de Ella Drua veo este niño que venia saliendo de las misma con sus pantalones remangados y sus zapatos en sus manos caminando hasta el muelle donde tomaría  su cayuco o bote para cruzar al otro lado del río. En otras ocasiones he visto a estos niños cruzando el rió y lavándose los pies usando la misma agua para seguir caminando por la calle rumbo a sus escuelitas.


          Los Emberá (una de las siete etnias indígenas que tiene Panamá) asisten a la escuela hasta sexto grado. A ellos les encanta aprender pero lamentablemente le es muy difícil seguir la educación, especialmente la secundaria, ya que se encuentran lejos de donde viven. Sin embargo, conozco un caso de otra comunidad indígena en donde la madre de una de las familias me contaba que su marido llevaba todos los días a su hija a la escuela secundaria para ello debía salir de su comunidad a las 4:30 de la mañana para que su hija pudiera entrar a la escuela a las 7:00 AM. No solo el levantarse temprano y la distancia que debían recorrer era el único obstáculo que tenían; También el tipo de camino que debían andar. 
        Por ejemplo: el transporte que usaban para cruzar el lago en la oscuridad de la madrugada era en un cayuco de dos personas en donde el equilibrio jugaba un papel importante ya que se remaba de parado (ellos están ya acostumbrados a este tipo de transporte) en una zona de lagartos (hoy en día siguen con el mismo transporte). A pesar del desafio diario para ir a la escuela secundaria, esta familia no se quejaba para nada al contrario estaban agradecido de que su hija (en este caso) pudiera llegar a tener un título secundario. Este ejemplo es algo que deberíamos aprender de ellos ya que tanto nuestros hijos como nosotros mismos alguna ves hemos despotricado por ir a la escuela y por levantarnos "temprano".           
          A veces uno escucha a sus hijos o recuerda los viejos tiempo de la secundaria en donde hacíamos tanto problema para ir a la escuela poniéndonos de mal humor por levantarnos "tan" temprano a la mañana. Bueno creo que esta anécdota no deja que pensar y decir: Que desagradecido que éramos, no? 

1 comentario:

Unknown dijo...

ME PARECIO MUY BUENA LA NOTA Y SOBRE TODO QUE CUANDO LA TERMINE DE LEER FUI A VER A MI HIJO Y LE CONTE COMO LOS NINOS O MUCHOS NINOS VAN A ESTUDIAR CON TANTO ESFUERZO Y CON TANTO PELIGRO Y NOS QUEJAMOS A VECES CUANDO EL AIRE ACONDICIONADO DEL AUTO NO FUNCIONA Y SOLO ESTAMOS DE LA ESCUELA A 1MILLAS . ES BUENO COMENTARLO PARA QUE CADA UNO AGRADEZCA DE LO QUE ES LEVANTARSE CADA DIA Y TENER TODO ..MUCHAS GRACIAS FERNANDO POR TODOS TUS COMENTARIOS SON DIGNOS DE LEER .COSAS SIMPLES QUE A VECES NO REFLEXIONAMOS PORQUE SON COMUNES PARA UNO ./ SANDRA