El ir a las comunidades indígenas es algo que no me deja de sorprender. Hoy, por ejemplo, fui a visitar a la comunidad de Ella Drua – significa en términos Emberá: Comunidad en la colina – para monitorear el acueducto que el proyecto construyó hace ya un año. Para eso hay que subir una colina hasta llegar a una represa ubicada a lo alto de la misma. En el camino veo una culebra justo en una de las ramas que casi agarro para no caerme. Esto fue algo que me había sorprendido ya que no es grato caminar por lugares donde uno puede encontrar culebras en el camino. A pesar de este pequeño incidente lo que mas me llamo la atención fue ver al abuelo de la comunidad con sus ochenta y tantos años de edad arriba de unas estructuras alta de madera atando Pencas.
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Este "super abuelo" estaba trabajando en la construcción de una casa junto a sus nietos para que unos miembros de la comunidad puedan tener su propia casa. La casa o bohío lleva un techo de Penca (hoja de palmeras) por la cual el abuelo es experto en la colocación de los mismos (foto izquierda). Este bohio también lleva unos listones de madera para sostener la infraestructura trayendo los mismos desde el monte cargándolos a hombro como ellos saben hacerlos. La futura casa estará localizada arriba en la colina para que no sea afectada por las grandes inundaciones que trae la temporada de invierno. Realmente es la primera ves que veo construir este tipo de bohío pero lo mas llamativo fue ver al abuelo y sus 80 y pico de años trabajando en los detalles del techo.
El abuelo es el hombre de mas edad en la comunidad y es el que mas sabe sobre la construcción de Pencas por eso todavía con su edad sigue trepando en los techos (foto izq.) para darle los toques necesarios y para enseñar a lo mas jóvenes como se debe trabajar con la Penca. Es sorprendente ver al abuelo subir y bajar los palos que sostienen la casa su estado físico es envidiable al igual que sus ganas de trabajar. Por eso más allá de nuestra aventura subiendo la colina que siempre presenta un desafío diferente por su pronunciada inclinación, los animales que se encuentran en el camino, y los tropiezos que tenemos cuando caminamos por la cascada para llegar al tope, no tienen nada que hacer con el abuelo y su habilidad de trepar los palos a sus ya respetada edad.
Para visitar y ver mas de la comunidad ver:
Fotos de los animales que se encuentra en la comunidad:
El ir a las comunidades indígenas es algo que no me deja de sorprender. Hoy, por ejemplo, fui a visitar a la comunidad de Ella Drua – significa en términos Emberá: Comunidad en la colina – para monitorear el acueducto que el proyecto construyó hace ya un año. Para eso hay que subir una colina hasta llegar a una represa ubicada a lo alto de la misma. En el camino veo una culebra justo en una de las ramas que casi agarro para no caerme. Esto fue algo que me había sorprendido ya que no es grato caminar por lugares donde uno puede encontrar culebras en el camino. A pesar de este pequeño incidente lo que mas me llamo la atención fue ver al abuelo de la comunidad con sus ochenta y tantos años de edad arriba de unas estructuras alta de madera atando Pencas.
1 comentario:
Hola Fer... muy linda la nota del anciano... que barbaridad que con esa edad este haciendo un techo en la casa, muy lindas las fotos y bien sacadas... te felicito...
Papá
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